1. Cuida tus modales
La gente está impresionada por los buenos modales, y no estamos hablando solo de decir por favor y gracias aquí. Desea el tipo de habilidades sociales pulidas que las personas notarán y recordarán. Sostener puertas, renunciar a su asiento en el metro, enviar notas de agradecimiento, todas estas cosas son sutilezas sociales que la gente recordará, especialmente cuando otros están demasiado ocupados o demasiado obsesionados consigo mismos para ser educados.
2. Sea confiable
Haz lo que dices que vas a hacer y preséntate cuando digas que estarás allí. Suena fácil, ¿verdad? ¿Cuántas veces te has sentido decepcionado e irritado cuando alguien con el que contabas llegó tarde, canceló con poco o ningún aviso, o simplemente no se presentó, ofreciendo la excusa patética de que se olvidó? Construya una reputación de ser el tipo de persona de la que otros pueden depender.
3. Mostrar alguna clase
Mira cómo hablas, evitando el lenguaje vulgar y los chismes. Cuando todos los demás golpean a un amigo, colega o jefe, se niegan a participar. No dude en el cheque de almuerzo o cena, incluso si esto significa ocasionalmente tener que contribuir más de lo que le corresponde. Dé propina a los proveedores de servicios, lleve los regalos de la anfitriona a las fiestas, no se salga a la hora de comprar regalos: todas estas cosas son elegantes y la gente lo recordará por ello.
4. Llévate con aplomo
Mantén la calma bajo presión. Cuando todos los demás gritan, se quejan o se vuelven locos y se comportan de manera indigna, mantén un tono de voz tranquilo y rehúsate a despeinar tus plumas. En cualquier situación, haga una pausa antes de abrir la boca, respire hondo y recuerde que en el panorama general, lo más probable es que lo que esté sucediendo no sea el fin del mundo. Con ese conocimiento, reaccione adecuadamente.
5. Sé amable
Opere desde una posición de generosidad, en la que puede darse el lujo de otorgar gracia a las personas que lo rodean. Pase por alto los errores menores, las deficiencias y las fallas sociales, y no sienta la necesidad de crucificar a las personas por ellos. Sea inclusivo cuando trabaje en proyectos con colegas y subordinados, comparta el crédito y felicítelo cuando se lo merezca. Sea cálido, acogedor, amable, tanto en la vida real como en línea. Ser amable te convertirá en una persona con la que la gente quiere trabajar y estar cerca.
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Si alguna de estas cualidades no te resulta natural, sigue practicando. Adoptar nuevos comportamientos y hábitos puede llevar tiempo. Sigue trabajando en ello, y la respuesta positiva y la atención adicional que recibirás de quienes te rodean te ayudarán a mantenerte encaminado.